Para concluir con la materia de producción de prensa, hay que decir que fue muy interesante el ejerció que se realizo en esta, tanto trabajar en la logística (Decoración y campaña de espectactiva) para el evento del Sextante, como los ejercicios de escritura que hicimos durante las clases.
La satisfacción que se logra al saber que el evento del sextante salió bien, y que tiene unos excelentes comentarios después de su realización, me llena de orgullo saber que al final lo que se aprende en teoría lo aplicamos muy bien en la práctica.
jueves, 28 de mayo de 2009
Articulo... Sextante
“Las escenas del diario vivir”
Duberney Giraldo de 24 es una de las personas que trabajan en la calle, como “estatua humana” un arte callejero o un arte escénico. Esta es su manera sobrevivir y cumplir por lo menos las necesidades básicas
Una expresión mundial de arte; las estatuas humanas
Duberney, es un joven a simple vista simpático y emprendedor, es uno de los tantos hombres que sobrevive en este país de las guerras y las necesidades, de la caridad de la gente, que simplemente apoya su arte o siente lastima por su situación. El, es un padre de familia necesitado y rebuscador que con el solo pensamiento que sus hijos repitan esta historia, se lanza a las calles a conseguir un mejor futuro, no para él, sino para sus hijos de 10 mese y 2 años de edad.
Su trabajo es como el de muchos que vemos a diarios en la cuidad, es una “estatua humana”, Generalmente cambia de escenario como puede estar en un semáforo frente a la estación floresta del metro, puede decidir laborar en un semáforo del centro de Medellín.
Es un es un esclavo de la sociedad, de su familia, y sobre todo de sus pensamientos. Ojala, este trabajo para él fuera también remunerado en sentimiento como lo es en el dinero, pues el no trabaja por gusto el trabaja para subsistir.
Este joven, siempre quiso ser futbolista pero sabe que ahora es muy tarde y que ese sueño será ya imposible de cumplir. Pero no todo es color rosa como dice Henry Agudelo para su reportaje grafico en el colombiano “Aunque no crean, en la vida de las estatuas humanas se pasan malos ratos. Así como a las de verdad se les roban pedazos, les dan martillo y las orinan los perros, los borrachos y los niños, a las de carne y hueso les salen sus enemigos”
Pero Duber también tiene claro que lo que hace en las calles es un arte y que como tal podría estudiar y así trabajar en teatros y circos reconocidos de la cuidad o el país pero como buen colombiano, es conformista y no cree que nunca vaya a ser tan reconocido por su labor.
Un día de trabajo
Sale de su casa en el barrio Robledo Aures A eso de las siete de la mañana, se despide de su familia con la esperanza de que hoy sea un día mejor que el anterior, con ropa cómoda para caminar y trabajar coge camino loma abajo y en el transcurso de una hora y media que se demora en llegar a su lugar de trabajo, un semáforo frente a la estación floresta del metro le entrega su día a Dios.
En el semáforo en el que va posesionarse saca sus instrumentos de trabajo; un sombrero, la ropa adecuada para su personaje y un vinilo negro que utilizas como maquillaje, “me gasto un tarro día por medio” dice Duber. Y empieza a transformarse en la estatua humana de” un minero”.
Allí, se para por largo tiempo, y aunque se podría pensar que el estar parado en un solo lugar, por tantas horas bajo el sol, afectaría el estado físico y emocional de la persona. Pero según el psicólogo Eduardo Arango “el cerebro solo se vería afectado si pasa días seguidos sin moverse un solo instante, pues la sangre ya no circularía para que le llegue al cerebro y permita el funcionamiento normal, y si este se ve alterado puede causar problemas neuronales”.
Este joven finaliza su jornada se trabajo aproximadamente a las cinco de la tarde. Recogiendo su “sueldo” de aproximadamente 20.000$. “casi siempre cuando me va bien recojo en semana entre 20 mil diarios y los fines de semana 30 o 40” asegura Duberney.
Un oficio que se realiza por gusto
Andrés de 16 años vive en el barrio Olaya herrera, un amigo fue quien le enseño esta labor. Él trabaja de siete de la mañana a tres de la tarde, los sábados y domingos.
Cursa el décimo grado de bachillerato, le gustaría ser policía profesional. También le gustaría pasar a la universidad para estudiar ingeniería, y ve el estudio como la mejor opción para conseguir todo lo que quiere.
Ejerce esta labor por su independencia y para colaborarle a su mamá, dese hace un año, se gana de 20 a 30 mil,en cada uno de los días.
Andrés dice “Se que este no el mejor trabajo, pero por el momento lo hago por que quiero ayudar a mi mamá y como soy menor de edad no me dan trabajo en ningún otro lado”.
Según Rosmery Vásquez una espectadora del arte callejero, hay que buscar por todos lo modos subsistir “cuando veo a todas estas personas trabajando en los semáforos pienso que es una manera ingeniosa de ganarse la vida, pues en Colombia no hay muchas oportunidades de trabajo”
Estos dos personajes están unidos por un oficio similar, pero son dos seres totalmente diferentes y aunque la gente no lo piense o no lo crea, Duberney Giraldo trabaja por necesidad y falta de oportunidades, en cambio Andrés trabaja por gusto y por sentirse independiente. Igualmente sus jornadas de trabajo son muy desiguales.
De esta manera, estos son dos seres humanos como usted o como cualquier otra persona, tienen anhelos y muchos sueños, pero con necesidad y sed de oportunidades, que hasta ahora el destino y el país les ha negado.
Fuentes:
Duberney Giraldo de 24 años. estatua humana
Andrés de 16 años. Malabarista
Eduardo Arango. psicólogo
Rosmery Vásquez Espectadora, transeúnte
http://www.elcolombiano.com/proyectos/ReportajesGraficos/html/2006/estatuas.htm
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